Neurofides es un acompañamiento terapéutico creado por Imma Abad, Luisa Redondo y Amada Santana, para enseñar a pensar el mundo que ves. Educamos para la vida y desde la vida, es decir, para integrarnos en el mundo desde nuestro lugar en él.
El único poder que tenemos como humanos es el de elegir de nuevo, por ello que nos consideremos espartanas del todavía, porque siempre es el momento idóneo para, desde la conciencia, elegir de nuevo; de hecho, y en palabras de Pierre Magistretti, estrenamos cerebro cada día.
Educamos desde el pensamiento colectivo, desde la inteligencia emocional y social, y desde la confianza (de ahí nuestro nombre fides), para que nuestras estructuras de aprendizaje sean transversales y se complementen con el objetivo de consolidarse desde la funcionalidad y la eficacia.
Estudiamos el comportamiento cerebral (de ahí nuestro prefijo neuro) en consecuencia con la atención ejecutiva y el proceso de toma de decisiones, no sólo desde el punto de vista conductual sino en consonancia con el cognitivo y emocional.
Nuestro objetivo no es alcanzar el orden a través de la experiencia, sino que el orden sea la experiencia. El orden es una cuestión interna, de la paz mental nace una percepción pacífica del mundo; por ello, enseñamos a aprender de manera ordenada.
Todo lo que anhelas es porque algún día lo tuviste. Te ayudamos a recuperar aquello que te mantenía en armonía, atendiendo tus conflictos, dificultades y miedos para encontrar la causa que los creó. No nos quedamos delante del tigre a contar las rayas que tiene, sino que estamos dispuestas a despertar la mente dormida.
Es por ello, que defendemos la emoción, imprescindible en el aprendizaje, como energía que mueve al mundo, que alumbra nuestra cognición.
Nuestro cuerpo está compuesto por billones de fotones (partículas elementales y portadoras de la luz) y aunque las sombras nos envuelvan en algún momento determinado de vida, apagón emocional, la lámpara que hay en nosotros no desaparece, porque la veamos o no, sigue ahí y nos mantiene vivos.
El motivo de este continuo asistencial es reconducir la actividad mental para encender de nuevo esa luz.